Nacido en Temuco, Pedro Messone se trasladó de niño a Valparaíso, luego de que su padre, gerente de una sucursal de la multitienda Gath y Chávez, pidiera un traslado. Por eso el cantante se define hoy como «un porteño nacido en Temuco», y su trabajo extendido en Santiago nunca le quitó su nostalgia por Valparaíso, donde creció y estudió. Pero incluso así la familia mantuvo veraneos en el campo, un mundo que Messone disfrutó durante su infancia y cuyos códigos pasarían a integrar naturalmente su trabajo.
Pedro Messone se mudó a Santiago cuando ya era parte de Los Cuatro Cuartos, pero sin ninguna expectativa de llegar a vivir algún día de la música. Al igual que sus compañeros, mantuvo al principio al grupo como una afición seria pero no profesional, en la que se ocupaba en los ratos libres que le dejaban sucesivos trabajos de compra y venta. A medida que Los Cuatro Cuartos comenzaban a cosechar sus primeros éxitos en auditorios radiales, Messone se iba interesando también en el mundo del teatro.
Recibió la invitación para integrarse en el papel de uno de los lustrabotas al montaje de “La pérgola de las flores” que Eugenio Guzmán desarrolló en la primera mitad de los años sesenta junto al Teatro Ensayo de la Universidad Católica.